AGONIA PREMEDITADA (POR JOSEBA)

Agonía premeditada

Me cuenta Labaka que habrá ke ir a Pirineos, antes de la Kebranta, que quiere conocer el Marie-Blanque, Portalet y Hoz de Jaca. Le digo que sí, nada convencido, sabedor de lo que hay allí: miseria y agonía. Llueve en casa, y vuelve a llover, y 1.800 metros de cota de nieve en el Portalet. “A ver si nos vamos a quedar atascados”. Por fin escampa. Es miércoles, 27 de mayo. 7 de la mañana en Hernani. Nubes. Sin lluvia. Milagro. Salimos de la autopa en Orthez, y nos metemos en un camino vecinal hasta Mourenx con la abuela ke va a por la leche a 3 kms. por hora delante nuestro. Mourenx, Navarrenx, Oloron-Sainte Marie… Un camión, un tractor, las 9! Bengaaaaaa!

Nos cambiamos en Asasp-Arros, a 8 kms de Escot, pueblo maldito porque allí empieza el camino al infierno, al Marie-Blanque. Antes de llegar vemos un cruce que lleva a Arette, por Issor. Por allí se hizo la Kebranta del 2004, creo, porque hubo desprendimientos en el Marie-Blanque. Otro puerto cabrón! Escot vacío. Algún baserritarra nos mira como las vacas al tren. A un lado de la carretera los kilómetros y las pendientes. 2%, 5%, 5%... Bogordo (labaka) se va. Ya caerás, gañuflo, pienso para mi. Porque conozco lo que viene. Viene un 8%. Aguanto con el 34x23, y 96 kilos a cuestas. Y aparece la tortura. Una recta de 400 metros y el cartel de las pelotas: 1 km. sur 11%. Bogordo está a 100 metros, ahí cerca, pero no le pillo ni de coña! Me levanto sobre la burra, para no cargar los isquiotibiales, y voy inesperadamente cómodo. Axier Otaño está en la cuneta. Hace de manager y de tocapelotas a la vez. Que si voy bien. “Si, de cojones”, pienso para mí.

Me siento, empujo, chepazo limpio. Segundo kilómetro, al 9,5%. Ke bien, algún descansillo habrá. Para mí es el más duro. Carretera botona, rugosa, de las que te echa para atrás, de las que le gustan a Perico I. de Segovia. Otaño saca fotos con el móvil. Empieza la agonía. Ya solo me levanto cuando los isquios me dicen o te levantas o te paras. Tercer kilómetro: 13%!!!! Mecaguen sus muertos. Tiras, sufres, empiezas a darle a la pelota, que coño hago aquí. A la altura de una barrera hay 30 metros de descansillo, o eso parece, porque el cuenta kilómetros sube a 8 por hora. Asfalto nuevo, se va mucho mejor. Jodido, y a punto de hacer eses, pero se va mejor. Suena el móvil, seguro que es mi jefe!!!. Entre llamada y llamada alcanzo el último kilómetro. 800, 700 metros, reconozco la última ese, la recta y el claro del collado. Veo a Bogordo llegar, y a medio minuto voy yo. Que tal, pregunta Otaño? “Bueno, ya hemos sacau y bastante”. Para abajo. Los dos primeros kilómetros hay que darle. Atentos a las barreras canadienses, que te puedes meter una buena galleta, o reventar. Llegamos al avituallamiento de la Kebranta. 2.000 vacas en el prado, y sus correspondientes boñigas en el asfalto. Bajada a Bielle. Garrote!!! Carretera botona, sucia, gravilla, pero pillas 70-72 kms. por hora fácil.

Cruce hacia Laruns, Otaño entra en un Intermarche a por agua. Veo el Midi d’Ossau, majestuoso, arriba, con bastante nieve. Hasta allí hay que subir! Bogordo me pregunta por el Portalet, y le digo ke igual prefiero subir tres veces el Marie-Blanque que una el Portalet. Me mira con ironía. Dese Laruns son 29. Bueno, según algunos 27. El kilómetraje exacto me salieron 28,7 desde la primera paella de abajo. Se va bien hasta Eaux-Chaudes, y otro par de kilómetros más también. Camino a Gabas el tema se pone serio, kilómetros al 6-7%, y algún muro al 8-9%. Bogordo va como un tiro, con el 19-21, y yo ya con la tentación de meter el 25. Regulo, guardo, voy, porque me acuerdo de las rampas del Barrage, de la presa, y de los 11 kilómetros que hay después de Artouste.

Remonto la presa y me meto un gel. Me enciendo. Pasa Otaño con la bala azul (la furgo rociera), y veo a Joseba en el quinto coño. Se me cae el alma. Los primeros cuatro o cinco kilómetros voy cómodo, hasta las galerías, con el 23, a 12-13 por hora. En una ese aumenta la pendiente y me rompe. Subo al 25 y deambulo. 9-10 por hora. Me duele todo. Me animo a mí mismo y pienso, este es tu ritmo, gordo!!!. Intuyes el final del Portalet y aparece la bala verde. Bogordo con el chaleco verde, diciéndome que falta un kilómetro. Farfullo algunas palabras indescifrables. Llegamos al coche, y me caigo, casi cayéndome. Labaka me espera, para bajar hacia Panticosa, y le digo que le den por culo, que se vaya sólo. Insiste, pero ahora el cabezón soy yo. Me cambio, estiro, me duele todo, y para abajo. Pillamos a Joseba camino de El Pueyo, pero le mandamos a Panticosa, porque nos equivocamos de cruce. Le ofrecemos coche, pero se niega. Menudo es, de Goizueta. Le decimos que hay pavés goxua en Pueyo, pero está lleno de baches. El tramo hasta la subida de Hoz de Jaca es una mierda, se hace largo hasta en coche. Gravilla, estrecha, el cuerpo mallau…

Le esperamos en el comienzo de la subida y le deseamos suerte. Hoz es una putada. A que iluminado se le ocurriría meterla en el recorrido de la Kebranta? Labaka llega al cemento, y a Hoz, y le digo que cuidadín, que no se caiga al embalse de Búbal en alguna herradura. La bajada es peligrosa, y la subidita que hay después del túnel para volver a la general, una puñalada trapera. La gente grita de dolor en esa cuesta… de 200 metros!!! Pero llegas arriba y paraíso, y se acabó, y Jaca, y espaguetis a la carbonara, y pollo con setas, y una pepsi, y unas birras, el Barça-Manchester, unos cubatas y te pones a pensar en el 20 de junio. “Si para hacer 70 putos kilómetros has sufrido como un perro, ya verás en 206…”. Agonía premeditada. Que nos gusta sufrir!!!